Un nuevo paradigma para el tratamiento de los trastornos neuro-psiquiátricos

La Estimulación Magnética Transcraneal (EMT), también conocida como TMS (Transcraneal Magnetic Stimulation) fue aprobada por la Food and Drug Administration (FDA) en el año 2008 para el tratamiento de la depresión refractaria a los tratamientos convencionales luego que su eficacia fuera demostrada en un estudio multicéntrico internacional con más de 300 pacientes altamente resistentes a los tratamientos convencionales hasta ese momento. Luego de su aprobación, la eficacia y seguridad de este método fue demostrada y replicada en numerosos estudios controlados y a doble ciego, incluso conducidos por el National Institute of Mental Health (NIMH). Desde entonces muchos estudios más se han efectuado y estarían demostrando una alta tasa de remisión y respuesta en otros trastornos psiquiátricos como el Trastorno Obsesivo Compulsivo, Trastornos de Ansiedad, Depresión Bipolar, Adicciones, Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), Deterioro Cognitivo Leve, Trastornos Alimentarios, para el tratamiento de algunos de los síntomas de la Esquizofrenia, etc. Se está estudiando también en el Espectro Autista con resultados preliminares muy prometedores. En Neurología ha demostrado eficacia en el tratamiento de la Migraña, cuadros dolorosos, incluyendo el dolor neuropático y la Fibromialgia, enfermedad de Parkinson, para la rehabilitación de los Accidentes Cerebro Vasculares, Distonías, Tinnitus, entre otros.

Este método es no invasivo e implica la aplicación de pulsos magnéticos de alta intensidad (hasta de aproximadamente 2 Teslas) en zonas del cerebro que están ligadas a la depresión. Por ejemplo en el caso de la depresión, se estimula (con frecuencias excitatorias) principalmente la Corteza Pre Frontal Dorso Lateral izquierda. En el caso del Trastorno Obsesivo Compulsivo, por dar otro ejemplo, se inhibe (con frecuencias inhibitorias) el Área Motora Suplementaria y la Corteza Cingulada Anterior. Con estudios de neuro imágenes como la Resonancia Magnética Funcional, se ha demostrado que los pulsos magnéticos producen cambios eléctricos en el cerebro, que a su vez producen cambios químicos, los cuales conducen a la reducción o la eliminación total de los síntomas. El cerebro tiene casi 100,000 millones de neuronas y sabemos que cada una de ellas se conecta con otras 10,000 y se ha demostrado que el efecto de estimulación y modulación de zonas cerebrales especificas se propaga a través de los circuitos neuronales regionales también ligados a los trastornos a tratar, lo que genera una mayor respuesta terapéutica, estimulando la neuroplasticidad a través de mecanismos de neurogénesis y sinaptogénesis, mejorando la cantidad y la calidad de la transmisión interneuronal. Los efectos secundarios son prácticamente inexistentes, siendo el más común un leve dolor de cabeza luego de la primera sesión, fácilmente tratable con un analgésico común. El riesgo de convulsiones se redujo a una posibilidad remota estadísticamente desde que en el año 1996 se publicó la “Guía para el uso seguro de la Estimulación Magnética Transcraneal”. La EMT está contraindicada en pacientes con marcapasos, implantes cocleares o metálicos (ferromagnéticos) o masas intracraneales.

El Instituto de Neuroestimulación de Lima (INEL), es pionero en la EMT en el Perú, habiendo tratado con éxito cientos de casos de alto grado de dificultad. Somos también los únicos con extensa capacitación y experiencia en el extranjero en el uso de la EMT en países como EEUU y Brasil donde ya existen alrededor de 1,500 y 400 centros de EMT respectivamente. El INEL cuenta con tres equipos de última generación y tecnología de punta y acaba de adquirir el neuronavegador más avanzado del mundo para aplicar el tratamiento con la mayor precisión posible y con los protocolos más optimizados para mejor respuesta.

Dr. Michael Kabar, MD
Psiquiatra

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