Edgardo Malpartida, nació el 15 de Mayo de 1966 en la ciudad de Lima, hijo del Dr. Bertilo Malpartida, natural de Huánuco y de la señora Norma Fantini, nacida en la provincia constitucional del Callao.
“Somos tres hermanos, yo soy el menor de ellos, tengo dos hermanas mayores, Maritza y Norma Clara. Llevo 10 años de casado, mi esposa es la Dra. Patricia López, ella es Médico Fisiatra y tengo 2 hijos, Rafael de 7 años y Cristina de 4 años” nos comenta muy feliz Edgardo.
¿Dónde realizo sus primeros estudios y coméntenos cómo era de niño y adolescente?
Yo estudié primaria y secundaria en el colegio San Agustín de San Isidro, en el cruce de Javier Prado con República de Panamá. Bueno, les comento que de niño era muy inquieto y a la vez muy observador; pero también era un niño fácil de desconcentrarse.
Por ejemplo, yo siempre cuento que, cuando estudiaba en el colegio San Agustín, veía todos los días como construían el edificio del Banco Continental, el cual demoró casi 3 años en terminarse y eso me distraía mucho en la clase, me encantaba observar como construían; ver las grúas que levantaban los materiales, los obreros que iban y venían, todo eso me fascinaba.
De adolescente, siempre me gustó el deporte, era muy deportista, pero también me gustaba estar al lado de mi papá, siempre escuchándolo y haciendo en esa época algunos pequeños proyectos de inversión que él ya tenía en mente.
Mis Padres hicieron una linda familia y tengo la fortuna tenerlos a mi lado y que hasta ahora se mantienen juntos y felices, siempre ha sido la unión familiar nuestro principal valor. Por ejemplo los domingos, solíamos cocinar juntos y almorzábamos todos en unión familiar. De manera que les puedo afirmar que he sido y soy muy hogareño.
Coméntenos como fue su vida universitaria, que es una etapa totalmente diferente cuando uno es niño y adolescente. ¿Qué anécdotas recuerda?
Yo soy Administrador de Empresas, luego hice una especialidad de Gerencia de Clìnicas y Hospitales en ESAN. A mi me tocó vivir una época muy difícil en los 80, como a millones de peruanos, como el terrorismo, toques de queda, una inflación galopante, paquetazos, bombas. Siendo èsta una época difícil, tuve la suerte de hacer buenos amigos, de viajar también dentro y fuera del país, pasando una etapa bonita en mi vida a pesar de la situación que se vivía el país.
¿Cuáles son sus hobbies, que deporte le gusta?
Bueno yo siempre he sido deportista, practicaba el deporte de la raqueta. Jugaba frontón, tennis, bádminton, ping pong y que hasta el día de hoy lo disfruto ocasionalmente. Hace unos años empecé a correr tabla en Cerro Azul, actividad que me faltaba hacer, pese a mi edad (52 años), pensé que nunca iba a poder hacerlo, pero Cerro Azul es una playa fácil y apacible para los niños y para personas de mi edad, es un excelente lugar para aprender. Estos son los deportes que me encanta practicar.
¿Le gusta viajar? ¿Qué lugares conoce de nuestro maravilloso Perú y el extranjero?
Bueno, el Perú lo he conocido y disfrutado casi en su totalidad, gracias a mi papá, que es un hombre que siempre me ha inculcado querer mucho al Perú, en ese sentido conozco Sierra, Costa y Selva. He viajado por el Norte hasta Tumbes, Piura, Chiclayo, Trujillo y por el Sur conozco hasta Tacna. En la Selva, conozco Iquitos, Pucallpa, Madre de Dios( El Manu ), he estado en muchos albergues, me he bañado en los ríos que es realmente fascinante.
Mi padre me enseñó a convivir con la naturaleza, al punto de bañarme en muchos ríos, de manera que tengo la dicha de haber disfrutado al máximo el Perú. Igualmente, tengo la suerte de conocer algunos países de Europa, Estados Unidos y en Sudamérica: Chile, Colombia, Venezuela. He viajado muchas veces ya sea por trabajo o turismo.
En lo referente a la comida, sabemos que nuestra comida es una de las mejores del mundo ¿Que platos típicos le agradan?
Siempre digo que a mí me enseñaron a comer de todo, ya que tengo un padre de la sierra de Huánuco y a mi madre de la Costa, además tuve un tío de la selva, así que en las reuniones familiares comíamos de todo, como por ejemplo, caldo de patasca, picante de cuy, que son platos típicos de la sierra; asimismo ceviche mixto, jaleas, parihuelas, son platos de la costa y los juanes, tacachos, típicos de la selva, entre otros. De manera que puedo comer todo tipo de platos típicos del Perú.
Por otro lado y gracias a la influencia de mi familia materna, también me gusta la comida italiana que siempre estuvo presente en nuestro hogar, incluso aprendí a preparar varios platos de la zona como ravioles con diversos rellenos, tallarines y Fettuccine.
Actualmente como es su día a día, aparte de ser hogareño, como es la relación con sus amigos, que suelen hacer
Bueno yo tengo un pequeño grupo de buenos amigos con los cuales nos reunimos periódicamente para hacer deporte, salir a comer, viajar o para ir a un compromiso (cumpleaños o una boda) y la pasamos muy bien, pienso que otro de los grandes tesoros que tengo son mis buenos amigos.
Finalmente, como ve Ud. el futuro del país pero en términos de principios y valores familiares
Yo al Perú le veo un futuro maravilloso, pese a todo lo que está ocurriendo, vamos a saber sobrellevar esta carencia de principios, lo digo, no solo por los indicadores económicos positivos, como por ejemplo la deuda versus la reserva que tenemos, el PBI que sigue creciendo, el déficit fiscal que está controlado, tenemos indicadores que en Sudamérica pocos los tienen.
Somos un país rico en minerales y estoy seguro que vamos a superar todos estos problemas. Les comento una anécdota, cuando salimos de viaje con mi familia, he tenido la oportunidad de ver, que mi hijito de 7 años, a donde vayamos, se hace amigo rápidamente de los niños de cualquier lugar, por ejemplo, cuando estuvimos en Cerro Azul, se relacionaba con cualquier niño que encontraba en el pueblo y jugaban felices, como si lo hubiera conocido desde antes, eso me emociona, la empatía que tiene para relacionarse con cualquier niño de un pueblito cualquiera del país.
Es decir que tenemos desde su óptica una buena generación para el futuro.
Correcto, los niños peruanos son muy buenos, cosa que yo pude percibir por mi hijito; inclusive a pesar de tener una personalidad muy inquieta, los niños le tienen paciencia, lo agrupan, lo llaman por su nombre, lo hacen jugar, patean la pelota; a veces no patean la pelota, sino una botella de plástico y se adaptan. El niño peruano es muy bueno, creativo, muy noble; así que estoy convencido que el futuro del Perú está en manos de ellos y debemos seguir apoyándolos en relación a temas de alimentación, salud y educación. El Perú va a mejorar gracias a ellos, estoy seguro que los niños de esta generación van a tener mañana más posibilidades y van a mejorar y engrandecer a nuestro País.
Algo más que desee agregar
Quiero agradecer a mis padres por darme la dicha de la vida y a mi esposa por la dicha de darle vida a nuestros dos hijos y a uno que está por venir.